
El pasado sábado 18 de mayo fue la esperada boda de Lady Gabriella Windsor y Thomas Kingston, tras tres años de noviazgo. Y es que, pocas cosas nos gustan más que una boda real. Esta semana, os desvelamos todos y cada uno de los detalles de la boda y del look nupcial de Lady Gabriella.

El enlace tuvo lugar en la capilla San Jorge del Castillo de Windsor, y la posterior celebración se desarrolló en Frogmore House, muy cerca del lugar de residencia de los duques de Sussex. Entre los invitados, la reina Isabel II de Inglaterra, prima carnal del padre de la novia Michael de Kent, ha eclipsado al resto de asistentes. Vestida con un intenso a la vez que elegante, conjunto de abrigo rosa y vestido estampado realizado por Stewart Parvin, que combina a la perfección con un sombrero de Trevor Morgan, unos exquisitos guantes blancos y unos clásicos zapatos negros con bolso de mano a juego.
EL VESTIDO Y EL VELO
Tanto el interminable velo como el vaporoso y elegante vestido, son obra de la magnífica aguja de diseñadora italiana Luisa Beccaria, sobre todo reconocida por vestir a celebrities tales que Sarah Jessica Parker o Angelina Jolie entre otras.


Romántico y fluido, vestido tiene un corpiño ajustado palabra de honor, con encaje y bordados superpuestos, cubriendo la voluminosa falda y la larga cola, y haciendo un juego de transparencias en el escote y en las mangas.
El vestido se ha confeccionado a medida, adaptándose perfectamente a la silueta, gusto y exigencias de Lady Gabriella. Dicha confección, ha tenido una duración de cinco meses, durante el transcurso de los cuales se le han realizado tres pruebas, la primea en Milán, en la sede de la diseñadora y las dos últimas en Londres, ciudad de residencia de la royal.
El velo, de seis metros de largo, estaba compuesto por varias capas de tul rosa y blanco, unidas entre sí por pequeñas flores bordadas a mano.

Los vestiditos de las damas de honor así como los trajecitos de los pajes, son también obra de la diseñadora.
LA TIARA, EL MAQUILLAJE Y EL PEINADO
La tiara, es uno de los accesorios nupciales más característicos, que nunca pueden faltar en el estilismo de una novia de la realeza. En esta ocasión, se trata de una magnífica tiara de estilo clásico ruso en oro y plata con innumerables diamantes engastados, que perteneció a la princesa Marina de Grecia, la abuela de la novia.


En cuanto al maquillaje, Lady Gabriella ha apostado por la naturalidad. Las sombras ahumadas en tonos tierra en los párpados superiores y las pestañas marcadas acentúan sutilmente su mirada, mientras que los los labios rosados y las mejillas melocotón, resaltan la dulzura de su rostro.
Para el peinado, su larga melena rubia se recoge en un elegante y elaborado semirrecogido salpicado de ondas y trenzas.
EL RAMO

Las flores protagonistas del ramo de Lady Gabriella, fueron las rosas color marfil, obra del creador inglés David Austin, combinadas con otras de color melocotón, convalarias y arvejillas en tonos blanco y melocotón. Además, siguiendo la tradición de la familia real británica, el ramo incorporaba también ramas de mirto.